- 17 octubre, 2013
- Categorias: Empresas
Incentivar los resultados en tiempos difíciles: Los 5 pasos para implantar un sistema de retribución variable efectivo.
La gestión positiva de la retribución en un entorno de contención o incluso de recorte de costes, es clave para mantener alta la motivación del personal y generar expectativas de mejora y participación en la misma por parte de los empleados.
La fórmula para mantener expectativas positivas por parte de los empleados en cuanto a retribución, pasa por establecer modelos de compartición del éxito acotados, concretos, y creíbles. Un sistema de retribución variable en función de resultados permite focalizar los esfuerzos de las personas e implantar en la empresa una cultura orientada a resultados.
No olvide que la percepción positiva de la retribución recibida, depende de la percepción de dos factores concretos: La equidad o justicia, y el merecimiento.
Un sistema de retribución variable en función de resultados aborda claramente el factor merecimiento, pero puede distorsionar el factor equidad si no está establecido sobre una base sana y equitativa de retribución fija. Por eso es recomendable una visión global de la retribución fija y total en la empresa o departamento antes de abordar la implantación de un sistema de retribución variable.
Para implantar un sistema de retribución variable de forma efectiva, debe Ud., tener en cuenta los siguientes pasos:
- Analice si en el colectivo que considera, existen indicadores objetivos de fácil comunicación y seguimiento, y cuya consecución fomente los comportamientos y resultados deseados.
- Elija aquellos indicadores que puedan estar “presentes” en la actividad de las personas lo más cotidianamente posible, y que no haya que esperar al final del periodo para hacer complejos cálculos para determinar las cuantías de la recompensa.
- Establezca “reglas de juego” claras haciendo participes los propios usuarios consensuando tanto las reglas de juego y los indicadores a utilizar.
- Comunique y formalice con el colaborador, a título individual o colectivo según aplique, tanto el establecimiento de objetivos como los pagos, de forma que quede claro la no consolidación de las recompensas y las reglas de juego que se siguen.
- Mantenga el sistema simple, tanto en reglas de juego como en número de indicadores, y haga seguimiento periódico de la evolución de los indicadores como herramienta de gestión y seguimiento de la actividad.
Incentivar los resultados en tiempos difíciles: Los 5 pasos para implantar un sistema de retribución variable efectivo.
La gestión positiva de la retribución en un entorno de contención o incluso de recorte de costes, es clave para mantener alta la motivación del personal y generar expectativas de mejora y participación en la misma por parte de los empleados.
La fórmula para mantener expectativas positivas por parte de los empleados en cuanto a retribución, pasa por establecer modelos de compartición del éxito acotados, concretos, y creíbles. Un sistema de retribución variable en función de resultados permite focalizar los esfuerzos de las personas e implantar en la empresa una cultura orientada a resultados.
No olvide que la percepción positiva de la retribución recibida, depende de la percepción de dos factores concretos: La equidad o justicia, y el merecimiento.
Un sistema de retribución variable en función de resultados aborda claramente el factor merecimiento, pero puede distorsionar el factor equidad si no está establecido sobre una base sana y equitativa de retribución fija. Por eso es recomendable una visión global de la retribución fija y total en la empresa o departamento antes de abordar la implantación de un sistema de retribución variable.
Para implantar un sistema de retribución variable de forma efectiva, debe Ud., tener en cuenta los siguientes pasos:
- Analice si en el colectivo que considera, existen indicadores objetivos de fácil comunicación y seguimiento, y cuya consecución fomente los comportamientos y resultados deseados.
- Elija aquellos indicadores que puedan estar “presentes” en la actividad de las personas lo más cotidianamente posible, y que no haya que esperar al final del periodo para hacer complejos cálculos para determinar las cuantías de la recompensa.
- Establezca “reglas de juego” claras haciendo partícipes a los propios usuarios consensuando tanto las reglas de juego y los indicadores a utilizar.
- Comunique y formalice con el colaborador, a título individual o colectivo según aplique, tanto el establecimiento de objetivos como los pagos, de forma que quede claro la no consolidación de las recompensas y las reglas de juego que se siguen.
- Mantenga el sistema simple, tanto en reglas de juego como en número de indicadores, y haga seguimiento periódico de la evolución de los indicadores como herramienta de gestión y seguimiento de la actividad.