Informe del factor sostenibilidad del Sistema Público de Pensiones


 

El pasado 9 de junio, el comité de expertos sobre pensiones entregó a la ministra de Empleo y Seguridad Social, el informe sobre el factor de sostenibilidad que ha elaborado en las reuniones que han mantenido desde su constitución. 

Tal y como se indica en la presentación del informe, el sistema de pensiones español se enfrenta a un reto extraordinario, pagar las pensiones a la generación baby boom, es decir, asumir de forma progresiva el pago de un 70% más de pensiones en 2046 (pasar de 9 a 15 millones de pensionistas). 

El mandato recibido por el comité de expertos es muy concreto: desarrollar un factor de sostenibilidad para el actual sistema de pensiones que: 

  1. Asegure que el sistema de pensiones español se sostenga por sí mismo.
  2. Refuerce el sistema ante la presión de las tensiones demográficas y condiciones económicas cambiantes. 

Las principales conclusiones que se detallan en el informe son que el Factor de Sostenibilidad se compone de dos fórmulas, el Factor de Equidad Intergeneracional (FEI) y el Factor de Revalorización Anual (FRA), que permiten repartir a lo largo de los años las cargas derivadas de las tensiones que en el sistema de pensiones ya están generando, y van a generar aun en mayor medida, el aumento de la longevidad y el aumento de la tasa de dependencia. 

Consideran que este Factor de Sostenibilidad es adecuado por cuatro razones: 

  1. La Seguridad Social debe adecuar sus actuaciones al principio de estabilidad presupuestaria.
  2. Minimiza los efectos del ciclo económico y suaviza muy significativamente los efectos sobre la pensión.
  3. Aunque el factor crezca menos de lo que podría en los años con superávit de ingresos, permite seguir dotando, con esos excedentes, el Fondo de Reserva, que, de esta forma, se convierte en un elemento útil para complementar las revalorizaciones en los años malos.
  4. La posibilidad de que su aplicación suponga un descenso nominal de las pensiones futuras es muy baja y, en cambio, es alta la probabilidad de que a medio y largo plazo, la pensión media real aumente. 

Ante unas previsiones que indican un aumento de la tasa de dependencia, la pensión media representará un porcentaje menor del salario. Ante esta situación, existe una combinación de alternativas con la que prevén hacer frente a esta situación: 

  • Aumentar el número de cotizantes incentivando la prolongación de la vida activa de los trabajadores y mediante reformas estructurales que incentiven el crecimiento, reduzcan rápidamente el desempleo y aumenten la población activa como consecuencia de nuevos flujos migratorios, atraídos por ese mayor crecimiento.
  • Aumentar los tipos impositivos, incrementar el porcentaje de los salarios que constituye la base de cotización y aportar ingresos adicionales al sistema de pensiones, por ejemplo, en la línea de los niveles existentes de media en los países de la Zona Euro.
  • Aceptar la disminución de la ratio de la pensión media sobre salario medio, asumiendo que los jubilados reciben pensiones del sistema público (las cuales pueden seguir aumentando en términos reales), que podrían complementarse con ingresos procedentes de su ahorro privado. 

El propio comité reconoce que el Factor de Sostenibilidad nace para moderar el crecimiento de las pensiones si los recursos del sistema no son capaces de soportar un crecimiento mayor. Sin embargo, debe tenerse en cuenta la situación de los pensionistas que ya lo son en el momento de su entrada en vigor y para los que la pensión es la principal, y en muchos casos única, fuente de ingresos. Por este motivo, para los actuales pensionistas, se recomienda la aplicación de una cláusula que impida el descenso nominal de su pensión. El Fondo de Reserva debería ser instrumento suficiente para equilibrar los efectos de esta cláusula. 

La aplicación de este factor supone la ruptura de una regla seguida en la última década y media, aproximadamente, la de vincular directamente la revalorización anual de las pensiones con el IPC anual. 

La recomendación final del informe es aplicar este factor dentro del periodo 2014 a 2019, si bien existen razones de peso para que se haga lo antes posible.

 

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